Cabaña Malevana: brillante pueblo polaco donde cada casa está pintada a mano

A unos setenta kilómetros de Cracovia polaca, hay un pueblo inusual famoso por sus casas pintadas. Pequeñas casas blancas, en las que muchos adornos florales, acababan de salir de la página de los cuentos populares. Y esta tradición comenzó muy banal: era necesario ocultar de alguna manera la terrible negrura de los muros.

Tapa las paredes negras

Con adornos coloridos, las casas en Zalipye comenzaron a decorarse en el siglo XIX. Sin embargo, el amor por la creatividad fue forzado: los lugareños intentaron pintar las paredes ennegrecidas antiestéticas. El hecho es que se instalaron estufas viejas en las casas en ese momento, y las paredes de hollín dentro y fuera de la casa comenzaron a oscurecerse con el tiempo. Así que al principio simplemente se blanquearon, y luego un adorno comenzó a aparecer en las casas. Al principio era muy sencillo: líneas y puntos geométricos, zigzags, círculos. Pero, aparentemente, las amas de casa se dejaron llevar por la pintura y comenzaron a crear verdaderas obras maestras.

Todo comenzó con estufas y paredes, luego las puertas y ventanas comenzaron a enmarcarse con adornos, y más tarde los artistas locales generalmente se dispersaron, pintando todo: pozos, casetas de perros, cobertizos y cuartos de servicio. Y pintaron no con pintura ordinaria, sino solo con la que estaba disponible. Hay hollín, arcilla marrón y lima. La leche, el azúcar y los huevos reemplazaron el pegamento, e incluso las artesanas hicieron cepillos, a partir de caballos y cabello humano. Entonces Zalipye se convirtió en un verdadero pueblo de cuento de hadas donde vienen los turistas.

Cabaña Malevana

Probablemente, las casas coloridas y la tradición de pintarlas habrían desaparecido durante mucho tiempo, de no ser por una reunión fatídica. A principios del siglo XX, un empleado de oficina visitó aquí, que se enamoró del brillo y la originalidad del pueblo. Y pronto, en una de las revistas etnográficas locales, se publicó su artículo sobre Zalipye. Y después de la Segunda Guerra Mundial, la competencia "Malevan Hut" comenzó aquí: se ejecuta hoy y reúne a etnógrafos no solo de Polonia, sino también de otros países. Así que pintar en casas se ha convertido en una verdadera tradición: se pueden encontrar edificios tan coloridos en las aldeas vecinas.

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